jueves, 3 de enero de 2008

Mirar


Rara vez nos detenemos a mirar las cosas, todo pasa frente a nosotros como algo fugaz, rápido y sin importancia. Vamos por la vida apurados, y nos quedamos la mayoría de las veces con una mirada superficial de las cosas.
El tiempo que nos ofrecen la televisión, la Internet y la radio es breve. Tiempo con el cual no podemos llegar a emitir un juicio, ni tampoco a hacernos admiradores ni profundos observadores, solo podemos oír o ver de manera pasiva y recibir información tras información sin un momento posterior para poder razonarla. Las personas no somos maquinas y no debemos funcionar como tales.
Quizá por esta cuestión de captar todo tan rápidamente es que llegamos a concebir las cosas de manera general, sin tomarnos el detenimiento que necesitan.
Dentro de la sociedad es el artista quien necesita un margen de tiempo extra que es para la observación, de lo interno hacia lo externo. Para poder decodificar su idea y hacer la transposición de lo mental o a lo concreto. Un segundo para la interpretación, un tiempo para sentir, para poder encontrar la subjetividad, para dejar de lado los estereotipos y las generalidades…. Eso es lo que necesitamos, aprender a mirar.
C.L.

1 comentario:

Lucho Ibañez dijo...

A veces pienso que si todos miraramos con atencion esas pequeñas cosas que nombras...(como tambien las obras, tomarse tiempo para leer un blog, por ejemplo) descubririamos mas facil la belleza y mucho mas rapido lo malo en los demas...
Pero lamentablemente vivimos en la sociedad que vos decis, la que va rapido, la que no le importa mucho nada, salvo ellos mismos...yo diria, sociedad egoista.

Me gusta leer lo que pones.


Con gusto, Lucho.